viernes, 30 de abril de 2010

LA HUERTA A PARTIR DE TU MESADA !!!


LOS GERMINADOS : LA HUERTA EN TU MESADA NO ES NECESARIO SALIR AL CAMPO O TENER TERRENO PARA TENER VEGETALES FRESCOS DE LOS MEJORES Y CULTIVADOS POR VOS MISMO. 

¿Qué es la germinación?
La germinación es un proceso natural, mediante el cual una semilla, en unas determinadas condiciones, se convertirá en una nueva planta. Este proceso puede darse con la intervención del hombre, aunque precisa de determinados factores ambientales: la luz, temperatura, oxígeno y humedad, principalmente. Estos factores son cambiantes según el tipo de semilla: mientras algunas precisan de oscuridad para germinar, otras germinan mejor con luz total.
 
Plántula de habaUna semilla puede permanecer dormida o inactiva durante años, en espera de que las condiciones sean apropiadas para germinar. Hay especies capaces de esperar decenas de años en espera de su germinación. Otras, sin embargo, si no germinan en un tiempo determinado se pudren. Cuando las condiciones son apropiadas, la semilla toma la luz y el agua a través de la cáscara. El embrión crece y la cáscara se empieza a abrir, emergiendo primero una radícula (raíz) y posteriormente una plúmula (brote). Todo este proceso, cuando se completa, supone la conversión de la semilla en una nueva planta. De todas formas, no todas las plantas nacen de una semilla. Algunas, para reproducirse, lo hacen por medio de esporas, que son estructuras similares a las semillas. Las esporas son bastante más difíciles de germinar.

La germinación aumenta el aporte nutricional de cualquier semilla de forma extraordinaria. Siendo o no vegetariano, la opción de enriquecer con brotes cualquier comida es altamente saludable y muy económica.

¿Qué germinados son los más habituales o asequibles
Yo diría que el germinado más conocido por todos es la soja. En cualquier lado podemos ver brotes de soja, aunque cada vez se ven con más frecuencia en los supermercados y otros locales brotes más desconocidos como los de alfalfa, trigo… Son muy fáciles de germinar y conseguir:
  • Alfalfa
  • Cebolla
  • Garbanzos
  • Judías
  • Lentejas
  • Mostaza
  • Soja
  • Trigo
  • Muchos otros, como la cebada, berro, rábano, calabaza…
Casi todas estas semillas se encuentran con facilidad en comercios. Como ya se ha comentado, germinan rápidamente y de forma muy sencilla, siendo incluso una lección de naturaleza para los más pequeños, a quienes les encanta. El germinado resulta super-económico (una bolsa de un kilo de soja no llega a dos euros, imaginaos ese peso en brotes de soja), el resultado es generalmente espectacular; los brotes se pueden comer solos, escaldados, en sopas o en ensaladas… El aporte nutricional es, además, considerable.
¿Cómo conseguir los germinados? 
Los germinados pueden conseguirse fácilmente en establecimientos de herbodietética (herbolarios), aunque también se pueden encontrar en algunos supermercados (brotes de soja y alfalfa, principalmente) y también en algunos supermercados específicos como los chinos, etc. Incluso en algunos mercados se consiguen fácilmente brotes de soja y otros.
A pesar de la facilidad para conseguirlos, lo más cómodo es germinar directamente en casa. Nosotros, particularmente, germinamos de forma habitual soja y otras semillas. La germinación se puede hacer de una forma totalmente casera o bien de forma casera pero con germinadores comprados. Aquí os muestro uno en foto, se puede conseguir a través deCocina Vital y cuesta unos 24,95€ en el momento de escribir este artículo. Este germinador dispone de tres bandejas, con lo cual se pueden tratar distintas semillas al tiempo.
GerminadorSi os parece caro, no desesperéis. Para germinar soja, sólo hacen falta: un plato, soja verde en grano (se consigue incluso en Mercadona) y agua. Nosotros usamos un plato mediano, llano. Añadimos unos granos de soja hasta cubrir el fondo en una sola capa (supone unos pocos gramos), rociamos bien con agua y lo metemos en un armario. Tres veces al día repetimos la operación de rociar. En tres días, tenemos un montón de brotes de soja, nutritivos, sabrosos y muy económicos.

Los germinadores 
Básicamente, ya habéis visto en qué se basa un germinador. Pero ahora os daré la versión estándar u "oficial". Esta es la forma que nos muestra Eva Cabaca, tomada de la Toronto Vegetarian Asociation:
"Desempolva los viejos tarros de conserva, compra una pequeña estopilla o gasa, y puedes empezar a cultivar tu propio jardín justo encima del banco de tu cocina.
Por lo que se refiere a las semillas, la regla fundamental es que cuanto más pequeñas y ligeras sean las semillas más rápidas y fiables son (sí, existe el riesgo de que se forme moho). Prueba toda clase de granos, lentejas, pequeñas judías, semillas (girasol, alfalfa, fenogreco). Todas ellas deben estar en el máximo estado natural, con cáscara, pero no refinadas o rotas.
Pon las semillas a remojo durante un día, escúrrelas y ponlas en un tarro (1-3 L.), llenando aproximadamente una quinta parte del recipiente. Cubre la boca del tarro con la gasa y una goma elástica e inclínalo suavemente para permitir que las semillas se adhieran a los lados del frasco, sitúalo sobre un ángulo en un cuenco poco profundo para permitir que se escurra y espera que empiece la función. Durante otros 3 a 5 días tu papel será el de cuidador ya que tu jardín en miniatura necesitará un baño de agua de grifo una o dos veces al día para proporcionarle humedad y evitar la formación de mohos. A cambio, tus germinados se desarrollarán hasta los cielos y te permitirán confeccionar una sabrosa y saludable ensalada tan sólo añadiendo aceite de oliva y Tamari o adornando los ingredientes de tu ensalada habitual."
Como véis, la versión 'estándar' es muy sencilla. Con un tarro, una gasa y un elástico, sólo nos queda hacer pruebas hasta conseguir la germinación más adecuada a cada tipo de semilla. Incluso con sólo un plato, ¿porqué no?
Algunos germinados y sus propiedades en particular
  • El trigo: sus vitaminas antioxidantes (C y E) aumentan en un 600% al germinar. También se triplica el fósforo y el magnesio, así como el contenido en calcio. Al ser de sabor dulce, podemos elaborar desde panes hasta platos acompañando a la verdura e incluso ensaladas. Mucha gente no puede consumir trigo en su estado natural, pero el germinado contiene sus almidones ya predigeridos, por lo cual su digestión será mucho más sencilla.
  • La soja: podemos encontrar fácilmente semillas de soja blanca o verde. Las semillas de soja blanca son de digestión no tan fácil y acidifican la sangre. Yo, personalmente, uso la verde. Las propiedades de la soja son muy conocidas en la actualidad, aunque la soja germinada es más nutritiva si cabe. Es muy rica en minerales, su proteína es muy completa y aporta una buena cantidad de fibra. Es ideal para comer en ensaladas.
  • La alfalfa: no resulta sencillo encontrar una semilla más completa que la de la alfalfa. Es particularmente rica en triptófano y lisina. Contiene una gran variedad de minerales y vitaminas, y una proporción perfecta entre calcio y fósforo, algo que raramente se da en un alimento. Según se germine a oscuras o con luz tamizada, será más rica en vitaminas del tipo B, en el primer caso o vitamina C, en el segundo. Germinan en siete días y su uso puede ser muy variado. A mi, personalmente, me gusta mucho su sabor.
  • Las lentejas: estas grandes conocidas son muy nutritivas, aportan varios minerales como manganeso, hierro, cobre y cinc. Una de sus grandes ventajas es que su proteína se consume predigerida, por lo cual su digestión es muy sencilla. Al consumirlas, consumimos igualmente enzimas que siguen vivas en el brote. Aportan también algo de fibra y vitaminas. Se pueden combinar con casi cualquier cosa, especialmente con verduras. Además, germinan en sólo tres días.
Por lo general, todos los germinados pueden ser conservados durante varios días en nevera. Casi todos están preparados para su consumo en menos de una semana. Son económicos. Su relación peso/nutriente es extraordinaria, aportándonos minerales, vitaminas, proteínas de altísima calidad y fitoquímicos diversos. Se pueden emplear desde en sopas hasta en ensaladas, así como en guarniciones de verduras. Son bajos en grasa y aportan una cantidad de fibra que, en las dietas actuales, es cada más necesaria.  RECETAS DE COMO HACER PLATOS NUTRITIVOS Y DECORADOS  PROXIMAMENTE EN  http://www.cocinadenelson.blogspot.com